Pareja: Hetero (ColettexYuri CHINEN)
Género: Shoujo
Advertencia: aqui hay un enorme giro en la trama pero espero les guste :3
Aclaración: si no te gustan los heteros y piensas que un personaje de HSJ te pertenece estás equivocada :D El personaje de Colette tampoco me pertenece, lo tomé prestado ^^
Este es el capítulo 2 de esta historia, son tan solo 4, quiero terminar primero con este por que Tegomassu es uno de esos fics donde los personajes hacen lo que quiere y el escritor pierde la trama original de su propia historia D: me paso con Ryo el vampiro pero no me pasará con estos dos¬¬ douzo ^^
Romance Vampírico
Capítulo 2: Recuerdos~
Colette se peinó su lacio cabello y com ambas manos lo mandó hacia atrás. Lanzó una mirada al espejo como ensayando una sonrisa y por último se agregó perfume, unos invisibles en el cabello y ya estaba lista.
Bajó las escaleras a paso de tortuga, trataba de no tentarse con el barandal de la.misma, como antes hacía, deslizarse en ella para llegar más rápido al suelo. Continuó bajando con recíprocos pasos y que sonaban a cada paso.
–Colette deja ya de jugar—Colette relinchó—, tampoco hagas de caballo.
–¿Madre por que debo yo ser quien entrgue esos papeles?
–Solo debes entregar los papeles al señor y ya hija.
–Esta bien—se resignó.
Su madre junto con su tía se marcharon a la iglesia, Colette las alcanzaría luego. Primero debía entregarle los planos a un arquitecto, eran cosas relacionadas con su padre, la chica y su familia pronto irían a vivir para otro lado.
Tocaron la puerta.
–Muchas gracias, luego hablaré con tu padre para verificar que todo este en orden y qué debemos cambiar.
–Por nada.
Una vez que el hombre se marchó, la joven fue escaleras arriba para adentrarse en el biblioteca, sus padres habían decidido que era mejor para ella hacer sus trabajos en casa a que tener que ir hasta la biblioteca del pueblo los fines de semana.
Este contenía un montón de libros de matemática, historia, física, química y demás. Colette tomó uno en sus manos, muy poco peculiar pero muy original. Hechó un vistazo al muy antiguo objeto donde sus páginas amarillentas y poco visibles hacían ver o dar idea alguna de cuánto tiempo tendría ese objeto de tapa roja.
La chica ojeó una página con cierta nostálgia y añoranza aquella página.
Sus ojos entregaban calma a aquella imágen que, en blanco impreso, una figura de un joven, no muy mayor ni tampoco niño. Cerró sus ojos apretando sus párpados, tomo aire y resopló. Cerró el libro y lo guardó.
Bajó al primer piso para tomar apagar las luces y salir al fin directo a la iglesia.
Cruzó las siete calles y llegó a la plaza (parke) que se hubicaba en frente de la iglesia pero. Colette iba corriendo, se le hacía tarde.
–Co... Colette...
–¿Hm?—se detuvo.
–Aquí amada—¿Amada? ¿Colette oía bien?—, Colette querida a tu izquierda.
La chica que hasta ahora solo creía haber imaginado cosas volteó. Al ver a alguien tirado en el suelo saltó con un gran—¡Oh!—y corrió hacia el chico.
–Colette—sonrió y apenas lo pronunció.
–¿Quién eres? ¿Cómo me conoces?
–Colette si que has cambiado.
–Por favor me asustas, no entiendo nada o.O
–Primero ayúdame princesita.
–Ok, pero llámame Colette!
Entonces Colette llevó a casa a aquel chico creyendo que quizá era algún familiar.
Colocó al joven sobre un sofá. Trajo un poco de café para ambos y se sentó en el otro mueble en frente de su invitado.
–¿Cómo sabes mi nombre?—empezó Colette—, ¿Cómo te llamas?—. Ya eran dos preguntas—¿Cuántos años tienes? ¿Vas a mi escuela?
El chico se sacó el trapito mojado que tenía en la frente a modo anime—¡Son muchas preguntas!—exclamó.
–Bueno, bueno, ya tranquilo, no es para tanto.
–Mm, yo no soy un familiar tuyo—contestó cortante—. Yo he estado siempre presente—la miró—, he estado cerca tuyo pero, sin que te des cuenta.
–No entiendo… pero tu—la voz de Colette parecía desilucionada—, te pareces…
Hubo un leve silencio entre ellos.
–¿Acaso tu me conoces a mí—, interrogó objetando algo quizá—.
–No se por que, te pareces mucho a esa persona.
–La del libro—. Se levantó y le quitó el paño—. Te pareces mucho a alguien de un libro—prosiguió mientras iba a la cocina.
–¿Puedes mostrarme ese libro?
Colette vaciló en mostrárselo o no, era un extraño sea como sea, y su madre le había enseñado a no confiár en ellos. De por si ya debería dar una buena explicación de su ausencia en la iglesia.
–Vamos—algo tenía el joven y Colette no iba a perdérselo.
Ambos atravesaron el pasillo, la chica estaba muy nerviosa y quería deshacerse de ello. Empezó a silvar.
–¡No hagas eso!
–¡Es mi casa y hago lo que quiero! e.é
–Tu nunca cambias -_-!
–¡No hables como si me conocieras!>.< —su acompañante rió incrédulo—¡De qué te ríes!
El corazón de Colette se paralizó por un momento. Si no lo conocía por qué lo había llevado a su casa, le encontraba parecido con alguien y encimas.lo confiaba.
Colette condujo la llave en la cerradura y abrió. Dejó a el chico entrar primero y luego entró y cerró la puerta tras ella.
–¿Sabes? No porta cuánto pasa, sigues siendo tal y cual eres.
–Luego me confundes más, te voy a enseñar el libro.
–Ya sé cuál es—se adelantó—, puedo sentirlo, yo olvidé que esto alguna vez existió.
Colette quedó expectante, y mientras el joven se le acercaba, su corazón palpitaba a más no poder.
–Yo me llamo, Yuri Chinen—sus pasos retumbaban en la cabeza de Colette. Acaso tu… tu eres… Y Colette dirigía su vista al piso, Yuri quedó a escasos centímetros de ella—, ¿Quieres mostrarme la página?
Colette levantó la vista–. Si llegas a resultar muy parecido..
–¿Hm?—arqueó una ceja ante su silencio.
–Yo voy a...
Abrió aquella página que se la sabía de memoria, por lo tanto no necesitaba buscar. Al ver que eran idénticos se desplomó y por fortuna Chinen la atrapó.
–Descansa… amada mía.
Continuará♥
Bueno, esperense que ahí no termina, mmm es un gran cambio con respecto al fic anterior pero es que quería darle una trama más convencional, es mi primer Shoujo serial y no quería que fuese menos ^^
Cuidense ^^ comments please :D
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